Para una correcta planificación sectorial, el balance energético tradicional requiere información más detallada sobre el consumo, abarcando subsectores, categorías de uso y eficiencia de los equipos. El Balance de Energía Útil (BEU), que mide la energía realmente aprovechada tras descontar pérdidas en conversión y transporte, ofrece una visión más precisa de la eficiencia energética sectorial y es clave para evaluar la sustitución de fuentes y la competitividad de precios y tarifas. Para ello, debe reflejar ineficiencias a lo largo de toda la cadena energética, desde la extracción hasta el consumo final. Este documento propone actualizar la metodología de BEU de la OLADE, basada en su implementación en tres países de la región: Ecuador, Panamá y Paraguay.