Este pasado 5 y 6 de junio, 20 naciones de América Latina y el Caribe han avanzado en la creación de una hoja de ruta común para una planificación energética coordinada y resiliente, en el contexto de la II Reunión del Consejo Regional de Planificación Energética y la VIII Reunión del Foro Regional de Planificadores Energéticos (FOREPLEN). Estos eventos fueron organizados por la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en la sede de la Empresa de Pesquisa Energética (EPE) en Brasil.
El Consejo, que fue establecido durante la IX Semana de la Energía en Paraguay, se afianza como una plataforma técnica y política permanente destinada a armonizar los esfuerzos de planificación entre los Estados miembros, fortalecer las capacidades institucionales y fomentar una transición energética que esté en línea con los compromisos del Acuerdo de París. El foro reunió a representantes de 20 países y de organizaciones internacionales como la Agencia Internacional de Energía (IEA), la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA), GET.Transform, CAF y CIER. Entre los participantes, se destacaron Leandro Albuquerque, secretario adjunto de Planeamiento y Transición Energética del Ministerio de Minas y Energía de Brasil; Thiago Prado, presidente de la EPE; Martín Abeles, director de la División de Recursos Naturales de CEPAL; y Mauricio Tolmasquim, fundador y primer presidente de la EPE.
Guido Maiulini, jefe de Asesoría Estratégica de OLADE, en el acto inaugural, declaró: “La planificación energética coordinada es fundamental para optimizar recursos, disminuir costos y asegurar una transición justa y sostenible. Desde OLADE, estamos creando un espacio regional que facilita el intercambio de experiencias y la cooperación técnica entre los países”. Tolmasquim enfatizó la importancia de establecer una agenda de planificación continua que trascienda los ciclos gubernamentales. “Una planificación coherente permite reducir costos de capital, atraer inversiones y avanzar en proyectos estratégicos como la integración eléctrica con Bolivia”, afirmó.
Durante las sesiones técnicas, los delegados examinaron un diagnóstico regional basado en los planes energéticos de más de 15 países miembros de OLADE. El estudio reveló progresos en eficiencia energética, promoción de energías renovables y acceso universal, aunque todavía existen desafíos, como la alta dependencia de combustibles fósiles y la necesidad de modernizar los marcos regulatorios y las herramientas de planificación.
En el ámbito técnico, se compartieron experiencias avanzadas de planificación de países como Brasil (PDE/PNE), Chile (PELP), Colombia (UPME), México (PRODESEN) y Perú (PRUEE 2050), que utilizan modelos integrados como LEAP, OSeMOSYS, MESSAGE y TIMES. Rodrigo Moreno, investigador del Instituto de Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI) de la Universidad de Chile, presentó estudios que indican que una mayor integración eléctrica regional podría generar ahorros netos multimillonarios, reducir emisiones significativas de CO₂ y optimizar el uso de recursos complementarios. Las proyecciones sugieren que la región necesitará aproximadamente 300 gigavatios de capacidad de interconexión adicional para el año 2045.
Otro tema central fue la integración de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDCs) en las estrategias energéticas a largo plazo, donde los países compartieron estrategias y metodologías para alinear sus compromisos climáticos con la planificación energética.
Los delegados también trabajaron en el desarrollo de escenarios energéticos prospectivos para las subregiones Andina, Cono Sur y Caribe, lo que facilitará mejorar la coherencia y solidez de las estrategias nacionales y regionales.
La reunión culminó con la elaboración preliminar de una hoja de ruta regional que busca armonizar los enfoques de planificación, reforzar la cooperación técnica y mejorar la respuesta del sector energético ante los compromisos climáticos. Además, CEPAL presentó una propuesta metodológica para crear una guía regional destinada a estandarizar políticas energéticas sostenibles y resilientes.
El secretario Ejecutivo de OLADE, Andrés Rebolledo, en las palabras de cierre, enfatizó que el Consejo de Planificación es un instrumento estratégico para avanzar en la integración energética de América Latina y el Caribe. Desde OLADE, proyectamos este trabajo hacia un marco formal de integración regional. Nuestro compromiso es seguir impulsando colectivamente estos esfuerzos.
Con estos avances, OLADE reafirman su compromiso de apoyar a los países de la región en la creación de sistemas energéticos más integrados, resilientes y alineados con los desafíos de la transición energética global.